Jóvenes chinos con empleo
La educación profesional ayuda a sostener el crecimiento
La enseñanza y capacitación técnica y profesional se ha desarrollado rápidamente en China, pero los desafíos quedan en evidencia.
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En la actualidad, en China funcionan más de 17 mil centros docentes de educación profesional, 2 mil 090 centros de capacitación profesional y 400 mil escuelas de capacitación para adultos y órganos de capacitación sociales de diferentes tipos.
Anualmente se capacitan decenas de millones de personas/veces en las escuelas de capacitación para adultos y los diferentes tipos de órganos de capacitación sociales.
En China se ha formado un sistema de educación profesional de los niveles superior, medio y primario con especialidades completas de todos los sectores.
Entre los centros docentes superiores dedicados a la educación profesional figuran: 87 institutos técnicos profesionales, universidades profesionales de corto período, y escuelas técnicas especializadas; 10 escuelas especializadas superiores en reforma; 133 escuelas superiores para adultos y 188 especialidades en ensayo; y 18 escuelas técnicas profesionales medias que dictan clases de la enseñanza superior especializada.
Estos centros docentes suministran personas prácticas y técnicas a la primera línea de la construcción económica del país.
De acuerdo con el programa de desarrollo de la educación profesional de China, se reforma y reorganiza los existentes centros docentes superiores de la educación profesional, y se admitirá al sector a las escuelas profesionales medias calificadas, normalizándolas gradualmente para convertirlas en institutos tecnológicos profesionales.
El Banco Mundial ha ayudado a China a desarrollar la formación profesional durante dos décadas, para hacer que el sistema satisfaga mejor las demandas de los estudiantes y del mercado laboral.
Es fundamental respaldar a través de la formación profesional la transformación de las industrias chinas de alta concentración y baja especialización de mano de obra a industrias con más capital y trabajadores calificados. Formación práctica
Tibet universidad
Jiang Dian, de 24 años, está satisfecho con lo que ha obtenido gracias a la educación profesional.
Se graduó en Tecnología Ferroviaria en el Instituto de Formación Profesional de Nanjing y ahora trabaja como despachador del metro en esa provincia de China meridional.
“En la escuela recibí formación práctica sobre coordinación y vigilancia de trenes”, dice. “También aprendí disciplina”.
Su escuela entrena a los estudiantes de una manera casi militar, con ejercicios por la mañana a partir de las 5:00 h, marcha en fila a clase y a los dormitorios, etc., que los preparan adecuadamente para tareas en las que son responsables de la seguridad de millones de pasajeros de metro y trenes.
“Esto me ayudó a conseguir un empleo con facilidad, incluso antes de la graduación”, agrega.
En China, cada año, millones de estudiantes como Jiang se unen a la fuerza laboral con un diploma de Enseñanza y capacitación técnica y profesional (ECTP).
La ECTP está creciendo mucho en China.
De acuerdo con el Ministerio de Educación, el número de institutos terciarios de ECTP alcanzó la cifra de 1.184 y el de escuelas secundarias de ECTP es de 14.767, y se inscriben 11 millones de estudiantes por año.
El Banco Mundial ha colaborado con China en el desarrollo de la formación profesional durante 20 años.
Tres proyectos de 1990 a 2005, con préstamos de US$110 millones, han beneficiado a muchas personas.
Otros dos proyectos se pusieron en marcha en los últimos años, con el objetivo de mejorar la calidad de la educación en 11 escuelas de formación profesional y técnica en las provincias de Guangdong (i), Liaoning y Shandong (i).
Además se está preparando otro proyecto para respaldar las reformas de nueve instituciones de formación profesional de nivel secundario y terciario en la provincia de Yunnan. Cubrir la necesidad
Estas provincias forman parte de la historia de crecimiento de China:
Guangdong es el motor del crecimiento impulsado por las exportaciones del país.
La economía de Shandong está en el segundo puesto, justo después de Guangdong, mientras que Liaoning es una de las bases industriales más importantes y Yunnan es una provincia fronteriza estratégica y el “puente” entre China y el sudeste de Asia.
Durante los últimos 30 años, la abundante oferta de mano de obra barata de China ha impulsado el auge económico del país.
Sin embargo, el nivel general de conocimientos y habilidades de su fuerza laboral es relativamente bajo.
Solo la mitad de los 140 millones de empleados de las empresas urbanas pueden calificarse como “expertos”, de acuerdo con el Ministerio de Recursos Humanos y Seguridad Social de China. Mayor capital y alta calificación
La necesidad de trabajadores calificados aumenta a medida que las industrias pasan del modelo de alta concentración y baja especialización de mano de obra al de mayor capital y alta calificación.
La inversión en educación y capacitación técnica y profesional puede llenar el vacío, dicen los expertos.
Sin embargo, los institutos y escuelas de formación profesional de China se enfrentan a ciertas dificultades que señalan los estudiantes y graduados de las mismas. Dificultales
Las normas y planes de estudio de capacitación son a menudo obsoletos, los profesores mismos carecen frecuentemente de habilidades prácticas.
Es difícil lograr la participación sistemática de los empleadores y vincularlos al sistema educativo a fin de proporcionar capacitación en el trabajo para los estudiantes.
Algunas escuelas carecen de recursos suficientes, especialmente en las zonas rurales y las provincias más pobres.
Hay pocas “normas mínimas” claras para las escuelas de formación profesional en términos de equipamiento, docentes, etc., y la planificación para satisfacer las necesidades de mano de obra del mercado es insuficiente.
“Es fundamental una estricta supervisión de las escuelas de formación profesional”, dice Fan Qirui, de 21 años, capacitado profesionalmente en decoración del automóvil.
“La administración escolar era bastante aleatoria. Nadie controlaba sistemáticamente la calidad y los resultados”, afirma sobre la escuela a la que asistió. Reformas e innovaciones
Para solucionar estos problemas, los proyectos financiados por el Banco Mundial se concentran en reformas e innovaciones basadas en la escuela, entre ellas:
Fortalecimiento del vínculo entre la escuela y la industria.
Mejora de la administración escolar.
Introducción de un programa de capacitación modular basado en la competencia.
Mejora de la evaluación de los alumnos y del aseguramiento de la calidad en el ámbito escolar.
Reconversión profesional de los instructores y ampliación de su experiencia industrial.
Modernización de las instalaciones y equipos. Polìticas futuras
“Las reformas e innovaciones deben comenzar en el nivel de la escuela”, dice Xiaoyan Liang, un especialista superior en Educación del Banco Mundial, que gestiona los proyectos. “Aprender de las reformas e innovaciones basadas en la escuela es una característica importante de estos proyectos, que también generará enseñanzas y orientará el desarrollo de políticas futuras para todo el sistema”. Primeros resultados
El proyecto de Guangdong, que se ha estado ejecutando por dos años, ya ha dado los primeros resultados:
Se establecieron Directrices de colaboración entre la escuela y la industria y modelos de contratos.
Se creó en cada escuela un Comité asesor entre la escuela y la industria.
La Oficina Provincial de Recursos Humanos y Seguridad Social organizó en mayo de 2010 un foro provincial denominado “Cien Escuelas, mil empresas”, durante el cual más de 200 escuelas de formación profesional firmaron contratos con más de 1.000 empresas y se crearon casi 3.000 proyectos de colaboración.
Se elaboraron normas basadas en la competencia en cinco áreas temáticas: asistencia de vehículos, modelado CNC (Control Numérico Computarizado), turismo y hotelería, diseño de interiores, y análisis químico e industrial.
Se elaboraron 74 módulos con paquetes completos de enseñanza y aprendizaje.
Se pusieron a prueba nuevos materiales y pedagogías curriculares en 20 clases con la participación de 1.000 alumnos.
Respuesta positiva de los profesores y estudiantes.
“Para mejorar la competitividad de los modernos sistemas industriales de Guangdong", dice Wang Yang, secretario del Partido de la provincia de Guangdong, "no cabe duda que debemos construir un sistema moderno de formación técnica que sea competitivo a nivel internacional”. Clasificación
La educación superior en China se clasifica en licenciaturas de tres o de cuatro años, postgrados y doctoradosque se cursan en centros de enseñanza superior común, escuelas de enseñanza profesional superior, universidad por sistema de radio y televisión, centros de enseñanza superior de adultos etc.
La educación superior china tiene más de cien años de historia. Según las últimas estadísticas, de los 3 mil centros de enseñanza superior existentes, dos tercios son de propiedad pública, y el resto, privados.
El número de estudiantes en estos centros es de 20 millones y el porentaje de ingreso del total de estudiantes sobrepasa el 17 por ciento. Examen de ingreso
Antes de estudiar en la Universidad hay que superar el exámen unificado de ingreso.
Las universidades admiten a los estudiantes que sobresalen en el examen, considerando sus aspiraciones.
El contenido del examen y la nota mínima de admisión dependen del Ministerio de Educación y los departamentos educacionales a nivel provincial.
Casi todas las universidades de mayor prestigio son de propiedad pública.
Sólo los estudiantes rechazados por las públicas o los estudiantes adultos que también trabajan, eligen los centros docentes privados, universidades por sistema de radio y televisión o escuelas de enseñanza superior para adultos.
Durante los últimos años, los departamentos de educación de China han hecho grandes esfuerzos para desarrollar la educación superior ampliando el número de matrículas de las universidades públicas.
La formación de postgraduados también ha experimentado grandes avances.
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