Músicos independientes se caracterízan por la multiactividad

Los procesos y prácticas artísticas que se sitúan al margen de los circuitos de la industria cultural y de los establecimientos públicos, como la llamada música independiente, tienden a concentrarse en “pequeños mundos del arte”, como el polígono Roma-Condesa, cuya dinámica económica y cultural está impulsada principalmente por intermediarios situados en diferentes puntos del continuo de producción-consumo.
 Estos intermediarios-empresarios-promotores sostienen una economía cultural local mediante la creación de una infraestructura compuesta de pequeños y medianos establecimientos (foros, bares, cafés) que convocan a grupos musicales y a sus seguidores que forman la escena local, y permiten al mismo tiempo proyectarse a otros escenarios nacionales o internacionales.
 Así lo revelan algunas de las primeras observaciones surgidas del proyecto de investigación original Espacios y profesiones creativas en la ciudad de México. Transformaciones urbanas, mercados hiperflexibles y ciudadanía, que realizan profesores-investigadores y estudiantes de licenciatura y posgrado de la Universidad Autónoma Metropolitana (UAM), un estudio único en su tipo que es financiado por el Consejo Nacional de Ciencia y Tecnología (Conacyt).
 El enfoque de la investigación desde las perspectiva socio-espacial, laboral y cultural permite recuperar la compleja interacción entre mercados laborales, empresas culturales y ciudades, así como al conjunto de actores sociales que intervienen en este dinamismo cultural marcado por la internacionalización, las nuevas tecnologías de los medios de comunicación y la retracción de las políticas públicas en el terreno de la cultura, señaló la doctora Rocío Guadarrama Olivera, coordinadora técnica de la investigación.
 Dilucidar el impacto espacial de la cultura en la ciudad de México, su significado en términos de mercado de trabajo y particularmente la condición social de los artistas independientes son objetivos específicos del trabajo científico que abre brecha a un tema poco investigado en el país y cuya originalidad radica en vincular temáticas hasta ahora poco relacionadas como el desarrollo e impacto espacial de las profesiones creativas.
 La línea de investigación que la docente adscrita al Departamento de Ciencias Sociales desarrolla en esta investigación de largo alcance es la de los músicos independientes, y las primeras indagaciones señalan que el trabajo de estos artistas se caracteriza por la multiactividad, es decir, por la realización autogestiva de distintos proyectos desarrollados de forma simultánea.

La actividad de estos músicos independientes se concentra en espacios que poseen características que permiten el desarrollo de profesiones creativas tales como el corredor cultural Roma-Condesa.

 La investigación también se centra en conocer los procesos de intermediación en la cadena de producción, distribución y consumo de la música independiente en contextos específicos (locales); la construcción de redes de creadores independientes que subrayan la importancia de lo colectivo en el sostenimiento del mundo de la música independiente, y los tipos de unidades económicas, establecimientos o espacios específicos de presentación (foros, bares, cafés), así como ferias, festivales y eventos privados.
 El trabajo autogestivo, como es el caso de los músicos independientes, tiene un mercado de trabajo que debe ser estudiado, así como también la situación social de los artistas, observó Guadarrama Olivera, y es precisamente lo que se está documentando en esta investigación que espera publicar resultados durante este año.